Las lentes ICL pertenecen a un grupo de lentes denominadas FÁQUICAS, en las que implantamos una lente sin quitar ninguna de las estructuras anatómicas del ojo. Se respeta por tanto la configuración original del segmento anterior, con especial preservación de la córnea. Esto le confiere una de sus principales ventajas: la reversibilidad mediante el explante, en el remoto caso de que fuera necesario. Está indicada en pacientes por encima de 21 años y que presenten una miopía, hipermetropía y astigmatismo estables. En miopía podemos llegar a corregir 18 D, 6 D de astigmatismo y hasta 6-8 D de hipermetropía. Es una técnica corta y sencilla, se realiza bajo anestesia LOCAL (con gotas) y el paciente puede a los pocos días recuperar su mejor agudeza visual e incorporarse a sus tareas habituales.